- El método canguro implica el contacto piel a piel entre el bebé prematuro y sus padres, favoreciendo su desarrollo.
- Esta técnica ha logrado una alta tasa de supervivencia en recién nacidos con bajo peso en hospitales de Perú.
- El rol del padre es fundamental para fortalecer el vínculo afectivo y apoyar a la madre durante la recuperación del bebé.
- Los padres reciben formación especializada para cuidar a sus hijos en los primeros días cruciales tras el nacimiento prematuro.
El nacimiento de un bebé prematuro supone todo un desafío tanto para las familias como para los profesionales de la salud. En los últimos años, el método canguro ha cobrado especial protagonismo como una técnica sencilla y eficaz que marca la diferencia en la recuperación de los más pequeños. Esta forma de cuidar a recién nacidos no solo ofrece calor y protección, sino que también crea un lazo afectivo sólido entre padres e hijos desde el primer momento.
La participación activa de los padres, y en concreto del papá canguro, se ha consolidado como una de las mejores maneras de ayudar a los bebés prematuros a superar los primeros días, que suelen ser los más delicados. Gracias a este método, los progenitores no solo acompañan a sus hijos en el proceso de adaptación, sino que también se involucran directamente en su bienestar físico y emocional.
¿En qué consiste el método canguro?
El método canguro consiste en colocar al recién nacido, vestido únicamente con pañal, directamente sobre el pecho desnudo de su padre o madre, de forma similar a cómo lo haría un canguro en su bolsa. Esta práctica favorece el contacto piel a piel, permitiendo que el bebé mantenga una temperatura corporal estable sin necesidad de incubadora.
El calor y el ritmo cardíaco del adulto ayudan notablemente al desarrollo neurológico y fisiológico del pequeño. Además, se ha comprobado que esta técnica reduce significativamente el riesgo de infecciones y mejora la respiración así como la digestión del neonato. Para los padres, la experiencia supone una oportunidad única de estrechar vínculos y sentirse parte activa del proceso de recuperación de sus hijos.
El papel destacado de los padres en el hospital
Uno de los hospitales pioneros en la implementación de este método en Perú es el Hospital Guillermo Almenara, donde desde hace casi tres décadas se trabaja con la técnica del papá canguro, logrando una tasa de supervivencia cercana al 99 % en niños nacidos antes de la semana 37 de gestación o con bajo peso.
Los primeros días de vida son especialmente críticos, y la figura paterna juega un papel esencial. Los padres reciben formación específica por parte del personal sanitario. Aprenden desde cómo colocar a su bebé correctamente en el pecho, hasta cuestiones básicas como bañar, cambiar y sostener al recién nacido para no poner en riesgo su salud. Esta capacitación abarca desde el periodo de psicoprofilaxis hasta el posparto.
Durante el ingreso hospitalario, los progenitores no solo están presentes, sino que participan activamente en la rutina diaria del bebé. De esta forma, el método canguro no solo beneficia al pequeño, sino que fomenta el reparto de responsabilidades dentro de la familia y refuerza el lazo afectivo entre padres e hijos.
Beneficios clínicos y emocionales del método canguro
Entre los beneficios clínicos más destacados del método canguro se encuentra el mantenimiento de la temperatura corporal, que resulta vital para los prematuros, quienes tienden a perder calor con facilidad. Este contacto constante también contribuye a la estabilización de las constantes vitales, como la frecuencia cardíaca y la respiración.
Además de los avances médicos, la técnica promueve una mejor recuperación emocional tanto para el bebé como para los padres. El contacto piel a piel ayuda a reducir el estrés y favorece el apego, elemento fundamental para el desarrollo psicológico del niño. Los especialistas subrayan que la implicación del papá en este proceso es un elemento esencial para compartir la carga emocional y física con la madre.
Esta práctica se ha convertido en un referente en hospitales públicos de Perú, sobre todo durante celebraciones señaladas como el Día del Padre, en las que los padres canguros comparten sus experiencias y destacan lo gratificante que resulta formar parte de la recuperación de sus hijos desde el primer día.
Apoyo institucional y formación para familias
El éxito del método canguro en Perú se debe, en gran parte, al apoyo institucional del sistema de salud, en concreto de EsSalud y del Ministerio de Salud a través del Instituto Nacional Materno Perinatal. La formación continua a las familias es esencial para el correcto desarrollo de la técnica, así como para una transición adecuada entre el hospital y el hogar.
Los responsables del programa destacan la importancia de que padres y madres reciban toda la información y acompañamiento necesarios, desde el inicio del embarazo hasta el alta hospitalaria. Gracias a ello, el método facilita reducir la separación entre los bebés y sus familias, fortaleciendo los lazos afectivos y la seguridad en el hogar.
