- Investigadores hallan más de 250 colonias de Rhizopsammia wellingtoni en Galápagos, creído extinto desde 2000
- El coral demuestra resiliencia tras sobrevivir a fenómenos como El Niño y reaparecer en condiciones adecuadas
- El descubrimiento subraya la importancia de la conservación y el monitoreo en la región
- Estos hallazgos contribuirán a futuras estrategias de protección de los arrecifes en el archipiélago
El archipiélago de Galápagos vuelve a captar la atención del mundo científico gracias a un descubrimiento inesperado: un coral solitario, propio de la región y catalogado hasta ahora como posiblemente extinto, ha sido detectado prosperando en varias de sus islas. Este hallazgo representa un soplo de optimismo para la biodiversidad marina del área y pone en relieve la importancia de mantener esfuerzos constantes en la protección del entorno natural del archipiélago.
Grupos de expertos de la Fundación Charles Darwin y la Academia de Ciencias de California han confirmado la presencia y la reproducción activa de más de 250 colonias vivas del coral Rhizopsammia wellingtoni, una especie exclusiva de las Galápagos. La investigación ha sacado a la luz la capacidad de este coral para resistir los cambios ambientales extremos que han afectado la región en décadas recientes.
Un coral reaparece tras 25 años de ausencia
El Rhizopsammia wellingtoni fue avistado por última vez en el año 2000. Su redescubrimiento se ha producido durante una serie de inmersiones científicas en 2024, especialmente al sur de la caleta Tagus en la isla Isabela y, posteriormente, en enclaves como Punta Vicente Roca, Playa Tortuga Negra y Cabo Douglas, estos últimos en la isla Fernandina. En todas estas áreas, se han detectado colonias en una cornisa submarina a unos 12 metros de profundidad, lo que indica que el coral ha encontrado hábitats adecuados para su supervivencia.
El estudio no solo revela la existencia de estas colonias, sino también que presentan dos variantes cromáticas: púrpura oscuro y rojo-negruzco, coincidiendo con los registros históricos de ejemplares en museos de la década de los 70. Este aumento en el número de ejemplares y su diversidad genética es valioso para la conservación de la especie.
Resiliencia ante los fenómenos climáticos y repoblación
La supervivencia del coral se atribuye, en parte, a su capacidad de buscar refugio en aguas más profundas y frías tras episodios tan severos como el fenómeno El Niño, que provocó un grave incremento de la temperatura y puso en riesgo a numerosas especies marinas en la zona. De acuerdo con los expertos, momentos de temperaturas más suaves, como los asociados a La Niña, han permitido que el coral vuelva a las áreas menos profundas y así retomar su ciclo reproductivo.
La reproducción activa en diversas localidades sugiere que el Rhizopsammia wellingtoni no solo está sobreviviendo, sino que muestra signos de recuperación y expansión. Esta resistencia refuerza la necesidad de mantener prácticas de vigilancia y protección de los hábitats costeros, tan importantes ante el impacto de los cambios globales en los océanos.
El coral redescubierto no solo es peculiar por su historia, sino porque actúa como un sistema de alerta temprana ante el calentamiento del mar. Al ser especialmente sensible a las variaciones de temperatura, su presencia o ausencia puede anticipar futuras olas de calor que podrían afectar gravemente a la vida marina en el archipiélago.
El hallazgo invita a los investigadores a continuar con análisis genéticos, cuyo objetivo es determinar la conectividad entre las colonias halladas y evaluar en qué medida estas poblaciones pueden apoyar la repoblación de áreas que resulten degradadas por el estrés ambiental. Los resultados de estos estudios serán cruciales para diseñar estrategias de conservación a largo plazo en Galápagos.
La recuperación de este coral endémico demuestra la capacidad de resiliencia de los ecosistemas locales y subraya la relevancia global de Galápagos como laboratorio natural. Su seguimiento permitirá anticipar amenazas y proteger mejor uno de los entornos marinos más emblemáticos del planeta.