Durante la era mesozoica, los dinosaurios dominaban no sólo la tierra y el aire, si no también el agua. Existen varios géneros y especies de dinosaurios acuáticos. Sin embargo, existe cierta polémica con el término empleado, ya que no es posible asegurar que se tratara realmente de dinosaurios, si no de reptiles marinos. A pesar de este dilema, en general se le da el visto bueno a la denominación de dinosaurios acuáticos.
Estos gigantescos reptiles eran los reyes de los mares y de los océanos. Aunque suelen ser menos conocidos que los dinosaurios terrestres, algunos de ellos han ganado cierta popularidad. Entre los más famosos se encuentran los Mosasaurios, que tienen una aparición importante en la saga de «Jurassic World», los Plesiosaurios, en los cuales está inspirado el monstruo del lago Ness, y los Ictiosaurios, que tienen una forma muy similar a los delfines. Si quieres saber más acerca de los dinosaurios acuáticos, no dudes en seguir leyendo.
Características de los dinosaurios acuáticos
En los mares y en los océanos de la era mesozoica habitaban todo tipo de dinosaurios acuáticos. Algunos eran muy pequeños, mientras que otros han llegado a ser de los animales marinos más grandes que han existido. Actualmente existe más información sobre los reptiles acuáticos grandes que de los pequeños.
También en la vida marina se pueden distinguir por su tipo alimentación. Mientras que algunos dinosaurios acuáticos eran carnívoros, otros eran probablemente omnívoros, es decir, se alimentaban tanto de plantas marinas como de crustáceos y de otros animales. Como pasa también con los dinosaurios terrestres, podían vivir en grupo o cazar en solitario, según la especie.
Ejemplos de dinosaurios acuáticos
Los reptiles marinos tenían una gran diversidad en lo que respecta el aspecto, la adaptación al medio y el comportamiento. La gran mayoría de géneros están representados en diez órdenes importantes de dinosaurios acuáticos. A continuación hablaremos de los más importantes.
Los Ictiosaurios
El grupo de los Ictiosaurios es uno de lo más conocidos. A pesar de que su aspecto sea muy parecido al del delfín, no hay ninguna base establecida que demuestre su parentesco. Estos dinosaurios acuáticos vivieron en el Triásico y desaparecieron en el período del Cretácico. Su nombre significa «lagartos peces» y el primero fósil fue hallado en el año 1811.
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La dieta de los Ictiosaurios era carnívora. Podía moverse a gran velocidad en el agua, convirtiéndolo en un depredador marino importante del Mesozoico. Entre sus presas se encontraban principalmente los moluscos conocidos como amonites, pero también se alimentaba de peces y otros reptiles más pequeños.
Los Plesiosaurios
Al igual que los Ictiosaurios, los Plesiosaurios vivieron desde el Triásico hasta el período del Cretácico. Se trata de unos animales que tienen un cuerpo similar al de una tortuga sin caparazón, pero con un cuello muy largo. También hay que destacar que el monstruo del lago Ness está inspirado en los Plesiosaurios. Su nombra significa «cercano del lagarto».
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Respecto a su alimentación, se sabe que su dieta incluía peces y belemnites. Los expertos especulan que pudo haber usado sus dientes como una especie de trampa para capturar a sus presas.
Los Pliosaurios
Este grupo de reptiles marinos está compuesto por los reyes de lo mares. Son considerados los dinosaurios acuáticos más grandes que han existido. Las especies pertenecientes a esta orden existían desde el período del Triásico hasta el Cretácico. Tenían un aspecto similar al de los Plesiosaurios, pero con el cuello corto y una dentadura más puntiaguda.
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Se trata de dinosaurios acuáticos carnívoros que se alimentaban principalmente de peces y otros reptiles. Tenían aletas poderosas con las que podían alcanzar altas velocidades en el agua, siendo así unos depredadores muy peligrosos.
Los Mosasaurios
Durante el período del Cretácico, los Mosasaurios eran los depredadores marinos que dominaban los mares. En aquel entonces, otros grandes grupos de dinosaurios acuáticos ya se habían extinguido, como los Ictiosaurios y los Plesiosaurios. Tenían un aspecto parecido al de los cocodrilos, pero medían entre 3 y 18 metros. Según los expertos, estas enormes bestias marinas habitaban mares poco profundos y cálidos. Su dieta incluía peces, otros reptiles y aves buceadoras.
Los Thalattosaurios
El nombre «Thalattosaurus» significa «lagarto del océano». Se trata de unos reptiles marinos que tenían una cola aplanada y larga que utilizaban para propulsarse cuando nadaban en el agua. Se estima que podían alcanzar una longitud de cuatro metros. Los Thalattosaurios tuvieron una breve existencia en la era mesozoica. Aparecieron durante el Triásico medio y se extinguieron en el Triásico superior.
Otros grupos de dinosaurios acuáticos
Las órdenes de dinosaurios acuáticos que hemos mencionado hasta ahora son las más conocidas. Sin embargo, existen más grupos que representan a estos animales. Entre ellos destacan los cetáceos, que son unos mamíferos adaptados a la vida en el agua. Su nombre proviene del griego y significa traducido «ballena». En cuanto a su aspecto, es similar al de los peces. Existen tres subórdenes pertenecientes a este grupo: los odontocetos, los misticetos y los arqueocetos.
Otra orden a destacar son los Euriptéridos, también conocidos como «escorpiones de mar». A pesar de su nombre, no se trata de escorpiones, de hecho no tienen ningún tipo de relación con ellos. Mientras que algunas especies pertenecientes a esta orden tenían un tamaño de 20 centímetros, otras podían alcanzar hasta dos metros. Los Euriptéridos fueron una de las primeras formas de vida. Existieron hace aproximadamente 510 a 248 millones de años, durante el Paleozoico.
También los Placodontos son un grupo de dinosaurios acuáticos a destacar. Estos animales se parecían muchísimo a las tortugas. Al igual que ellas, estaban provistos de un caparazón duro para defenderse de los depredadores. Sin embargo, no tienen ningún tipo de relación, a pesar de haber desarrollado el mismo tipo de armadura. Los Placodontos vivieron durante el período del Triásico, hace unos 252 millones de años. Los expertos especulan que fueron originalmente dinosaurios terrestres que se adaptaron a la vida en el agua, convirtiendo sus patas en aletas. Respecto a las tortugas, tanto las extintas como las actuales forman parte de la orden de los Testudines. El rasgo más distintivo de estos animales es su duro caparazón.
Los Redlíquidos tampoco pueden faltar en este artículo. Vivieron en el cámbrico, hace unos 541 millones de años. Es posible que fueran una de las primeras formas de vida de las cuales acabaron surgiendo los dinosaurios acuáticos. Tenían varias características destacables como un aspecto primitivo y simple y un exoesqueleto duro para su protección. Muchas veces incluso tenían antenas, espinas y muchas patas. Los expertos piensan que habitaban en los fondos de los mares.
Finalmente quedan por mencionar los Lamniformes. A esta orden pertenecen los tiburones de gran tamaño. Entre ellos se encuentra el más grande y famoso que ha existido: el Megalodon, con una longitud de hasta 20 metros. Gracias a su cuerpo cilíndrico y su cola grande, podían alcanzar velocidades muy altas a pesar de su tamaño. Por lo general, los Lamniformes habitan en aguas cálidas.