- Una singular estrella de mar hallada en el cañón submarino de Mar del Plata se ha hecho viral por su forma peculiar, apodada como “estrella culona”.
- Se trata probablemente de una especie antártica como Labidiaster annulatus u Odontaster validus, ambas comunes en aguas frías.
- El hallazgo surge en el marco de una campaña científica internacional que explora la biodiversidad y los hábitats vulnerables de las profundidades marinas.
- Las observaciones han avivado debates científicos y bromas en redes, destacando el valor biológico y cultural de estas criaturas abisales.
En las profundidades del cañón submarino de Mar del Plata, a unos 300 kilómetros de la costa, un equipo de científicos logró avistar una estrella de mar que no ha pasado inadvertida. Su imagen, difundida a través de emisiones en directo de la expedición científica, ha generado tanto fascinación entre los investigadores como revuelo en redes sociales. Los usuarios no han tardado en bautizar a este ejemplar como la “estrella culona”, haciendo guiños humorísticos a su forma y comparándola incluso con el personaje Patricio de Bob Esponja.
Las fotografías y vídeos del animal captados por el canal de YouTube Schmidt Ocean —que retransmite en directo los hallazgos logrados por el vehículo submarino ROV SuBastian— han sido replicados por decenas de internautas e incluso propiciado la creación de memes. Más allá de la anécdota, el hallazgo pone de manifiesto la capacidad de estas transmisiones para acercar los misterios del océano profundo al público general y despertar su interés en la biodiversidad marina.
Un animal peculiar con nombre viral: ¿qué especie es la «estrella culona»?
El ejemplar apodado como “estrella culona” corresponde muy probablemente a una estrella de mar antártica, de especies como Labidiaster annulatus u Odontaster validus, que suelen encontrarse en aguas frías y profundas. Sus rasgos más llamativos son el color rojizo o naranja intenso y un cuerpo voluminoso, con un llamativo disco central del que irradian sus brazos. Aunque en redes sociales se habla de “trasero”, lo que realmente destaca es esa parte central, propia de los equinodermos, que nada tiene que ver con una anatomía similar a la humana.
Las estrellas de mar carecen de cabeza, cola o zonas posteriores como los vertebrados; su simetría radial hace que tengan un diseño corporal totalmente diferente, y la disposición de brazos y disco central responde a una estrategia evolutiva para sobrevivir en estos entornos extremos. Las comparaciones y bromas surgidas acerca de su forma han servido, no obstante, para acercar la biología marina a una audiencia mucho más amplia.
Este ejemplar es solo una de las muchas criaturas sorprendentes grabadas en el fondo del cañón durante la campaña de investigación. Entre basura arrastrada y especies aún poco conocidas, la estrella de mar ha saltado a la fama como un verdadero icono viral.
¿Tienen las estrellas de mar cabeza o trasero? Anatomía y singularidades
Aunque la popularidad las haya apodado “culonas”, la estructura central de estas estrellas de mar es simplemente su disco central, desde el cual se extienden los brazos y en cuya parte inferior se encuentra la boca. Carecen de órganos equivalentes a los que identificamos como cabeza o trasero en los animales de simetría bilateral, dado que en las estrellas de mar la simetría radial determina su diseño corporal.
Un estudio publicado en Nature aportó nuevas pistas sobre la organización corporal de estos equinodermos. Usando análisis genéticos, los investigadores de Stanford y Berkeley descubrieron que han perdido el cuerpo y la cola a lo largo de la evolución, quedando casi enteramente reducidas a la “cabeza”. A través de marcadores moleculares, localizaron las firmas genéticas asociadas a la cabeza en diferentes partes de las estrellas, desplazando gradualmente lo que habría sido el “torso” en otros animales.
De esta forma, la estrella de mar representa un ejemplo de anatomía radicalmente adaptada a la vida abisal, y su forma peculiar responde a millones de años de evolución para prosperar en el oscuro lecho marino.
La popularidad alcanzada por este ejemplar, gracias a la transmisión en directo y la participación activa del público en redes, ayuda a visibilizar la importancia de la investigación en entornos abisales y la necesidad de profundizar en su conocimiento.
Investigación marina y los retos de conservar la biodiversidad abisal
La “estrella culona” es solo una parte de una investigación mucho más ambiciosa. El proyecto científico, llevado a cabo gracias a la colaboración internacional y el uso de tecnología submarina avanzada, trata de documentar la biodiversidad, los hábitats vulnerables y los retos ambientales del fondo oceánico argentino. Para entender mejor estos hábitats únicos, puedes explorar las diferentes especies que habitan en estas zonas y su posible conservación en este artículo sobre conservación de estrellas de mar.
El vehículo ROV SuBastian, manejado desde el buque de exploración Schmidt Ocean, permite grabar imágenes a más de 1.000 metros de profundidad y registrar tanto especies singulares como signos de contaminación humana. Las largas sesiones retransmitidas en vivo han permitido que personas en todo el mundo puedan ver en tiempo real los descubrimientos, acercando la ciencia y la conservación a la sociedad.
Según los investigadores, el Atlántico Sur profundo alberga biomas únicos con una diversidad genética y biológica aún poco conocida. El trabajo del IBIOMAR-CONICET, junto a otras instituciones nacionales e internacionales, ha sido fundamental para incluir muestras de estas zonas en los estudios globales sobre la evolución y la conectividad de las especies marinas.
Además, las colecciones biológicas y registros obtenidos durante campañas anteriores aportan datos fundamentales para entender la importancia de conservar cada región marina de forma específica. La alta especialización y adaptabilidad de las especies de estrellas de mar y otros equinodermos subrayan la necesidad de proteger estos hábitats que, de perderse, no podrían ser replicados en otros lugares del planeta.
La estrella de mar viral encontrada en el cañón de Mar del Plata ha logrado unir ciencia y divulgación, curiosidad popular y valor ecológico. Su peculiar silueta y el humor de redes han servido como puerta de entrada a cuestiones más profundas sobre la anatomía y evolución de los equinodermos y la diversidad que se esconde bajo la superficie del mar. La investigación, la tecnología y la colaboración internacional contribuyen a que cada día valoremos y protejamos mejor este misterioso y frágil ecosistema de las profundidades.