Seguramente hayas oído hablar del estrés. Lo que empieza siendo una reacción natural del organismo ante una situación que puede acabar siendo un poco tensa, al final si no se sabe controlar pasa a formar parte del comportamiento de dicho ser: sea humano o gato. Sí, sí, tu querido felino lamentablemente también puede verse afectado por este, vamos a llamar, problema, porque en realidad es algo que, como a ti, le impide llevar una vida tranquila.
Y aunque no me creas, el estrés en gatos es muy, muy común. Mucho más de lo que debería. A menudo damos por sentado de que el peludo tiene todo lo que necesita, cuando a veces no es así. Por eso, en esta ocasión te voy a contar cómo se manifiesta el estrés en los gatos, y también cuáles son las causas más comunes de su aparición.
¿Cuáles son los síntomas de estrés en gatos?
Cuando un gato no logra controlar el estrés, ya sea porque no sabe cómo superar esa situación que le impide ser feliz, o porque no puede, su cuerpo va a intentar adaptarse a esta nueva situación. Y lo hará de una manera que le llevará a experimentar cambios en su comportamiento:
- Marcará con más frecuencia, con uñas y/u orina.
- Puede tener comportamientos agresivos de forma repentina.
- Abrirá la boca de forma continua o exagerada, ya que su respiración se vuelve más rápida.
- Es posible que coma menos, o que incluso empiece a querer comer otras cosas (telas, papel,…).
- Aparecen enfermedades tales como problemas gastrointestinales, urinarios, y/o respiratorios. Pero esto es solo en los casos graves, en los que el estrés se mantiene por mucho tiempo.
¿Qué causa estrés en los gatos?
Son muchas las posibles causas. El gato es un animal de rutinas: cada día necesita hacer lo mismo y más o menos a la misma hora. Pero además, es preciso que en casa se cubran sus necesidades de felino; es decir, hay que proporcionarle estímulos, jugar con él, y hacerle compañía a diario para que no le afecte el estrés.
Por este motivo, te voy a contar cuáles son las causas del estrés felino:
Aislamiento o encierro
Tomar la decisión de llevar un gato a casa debería de implicar ser responsable para con ese animal. Pero cuando se tiene en una vivienda y no se le presta la menor atención, o cuando se tiene encerrado en una habitación sin permitirle que haga vida con su familia, sin duda se estresará.
Castigos, ruido, gritos
Un gato no necesita esta tensión (en realidad, nadie). No es bueno para la salud, y causa mucho estrés. Además, este animal es muy sensible a los sonidos, por lo que si a ti te molesta un grito, a él le molesta mucho más. El felino no entiende los castigos, porque cuando se le castiga se le trata como a un humano, y él no es humano si no felino.
Obligaciones
Si tenemos un gato al que constantemente lo cogemos en brazos por ejemplo, o le obligamos a hacer cosas que a él no le apetece hacer, puede tolerarnos una o dos veces nuestro comportamiento, pero lo normal es que al final nos termine arañando o mordiendo para que le dejemos tranquilo. Si insistimos, acabará teniendo estrés.
Mudanzas o cambios en el hogar
A veces, los humanos tenemos que mudarnos, o hacer cambios en el hogar. Por ejemplo, puede que nos haya salido un trabajo en otra ciudad y tengamos que marcharnos, o que nuestra pareja vaya a vivir con nosotros. Estos cambios son muy importantes para toda la familia, y el gato necesitará de nuestra paciencia y amor para poder adaptarse.
Escasez de comederos o areneros
Si viven más de un gato en una casa, lo más recomendable es que cada uno tenga su comedero y su arenero para evitar situaciones conflictivas. A ellos les hace sentirse seguros ver que tienen cada uno el suyo. Aunque luego veas que comparten arenero por ejemplo, en el momento de hacer sus necesidades o de comer verás que solo utilizará ese arenero o comedero un solo gato.
Falta de socialización
Una de las causas de estrés más habituales es la falta de socialización. El gatito, entre los dos y los tres meses, debe de estar en contacto con los humanos (además de con sus hermanos) para que de adulto sea un gato equilibrado. Por este motivo, a la hora de adoptar siempre va a ser mejor llevarse a casa dos peluditos, a ser posible que sean hermanos o que tengan la misma edad, para que aprendan a comportarse como felinos.
Como has visto, son muchas las posibles causas y también, muchos los síntomas. Espero que tu gato no muestre ninguno de ellos, pero si lo hace y tienes dudas, no dudes en ponerte en contacto conmigo.