- Confirmada la presencia de Vespa orientalis en Mallorca con un primer nido retirado en Esporles y un ejemplar previo capturado en Binibona.
- Impacto notable en colmenas y cultivos: depredación de abejas, robo de miel y polen, y daños en frutas, con máxima presión en verano y otoño.
- Protocolo activado: más de 1.000 trampas, 20 reinas capturadas y 21 nidos de avispa asiática retirados; financiación Next Generation EU.
- Llamamiento a la ciudadanía: avisos al Servicio de Protección de Especies y uso de apps para facilitar la identificación y notificación.
La Conselleria de Agricultura, Pesca y Medio Natural ha confirmado la primera presencia del avispón oriental en Baleares. El primer nido de Vespa orientalis se localizó en el municipio de Esporles, en la zona de Ses Rotgetes de Canet, y fue retirado por equipos especializados durante la segunda semana de octubre.
La confirmación llega tras una captura primaveral de un ejemplar en Binibona (término de Selva), un indicio que ya apuntaba a la entrada de esta especie invasora en Mallorca. Con el hallazgo del nido y su retirada segura, el Govern ha activado el protocolo de control y vigilancia para evitar su expansión.
Confirmación y puntos de detección
El hallazgo en Esporles se produjo en un entorno periurbano de Ses Rotgetes de Canet, donde técnicos del COFIB actuaron para neutralizar el nido y evaluar la zona. Esta intervención se enmarca en las medidas urgentes que contempla el Servicio de Protección de Especies para responder ante especies exóticas invasoras.
Meses antes, durante la campaña de trampeo frente a otros himenópteros invasores, se capturó un ejemplar de avispón oriental en Binibona. Esa detección temprana permitió encender las alertas, reforzar la vigilancia y diseñar las primeras acciones de respuesta a escala insular.
Impacto sobre abejas y cultivos
El avispón oriental es un depredador eficiente que caza abejas melíferas para alimentar a sus larvas y aprovecha recursos de las colmenas como miel y polen. Esta presión reduce la capacidad defensiva de las colonias y puede comprometer la viabilidad de los panales, afectando de lleno a la apicultura local.
Además, esta especie consume frutas y vegetales, lo que puede depreciar cosechas y mermar producciones agrícolas en periodos de alta actividad. Para los agricultores y apicultores, el escenario obliga a extremar la vigilancia en los momentos críticos del ciclo anual.
El auge poblacional se da en verano y otoño, cuando las colonias alcanzan su tamaño máximo y la presión sobre colmenas y frutales se intensifica. Con la llegada del frío invernal, la colonia muere salvo las reinas fecundadas, que hibernan a resguardo y reactivan el ciclo la siguiente primavera.
Cómo identificar al avispón oriental
La Vespa orientalis presenta rasgos distintivos: cefalotórax de tonos rojizos, abdomen con dos bandas amarillas intensas y rostro amarillo limón. Las obreras miden en torno a 23 mm y las reinas pueden alcanzar hasta 30 mm, dimensiones que ayudan a diferenciarla de otros himenópteros presentes en la Península.
Los nidos suelen ubicarse bajo tierra o en oquedades de muros, tejados y otros huecos urbanos. Su actividad es particularmente marcada al final del verano y en otoño, con colonias que pueden agrupar cientos de individuos. A diferencia de la avispa asiática (Vespa velutina), la oriental muestra coloración más clara en rostro y bandas abdominales.
Respuesta de las autoridades en Mallorca
La Conselleria ha puesto en marcha el protocolo de actuación para el control y la vigilancia, coordinado por el Servicio de Protección de Especies con apoyo del COFIB y el asesoramiento técnico de la UIB. El objetivo es cortar cuanto antes posibles focos y minimizar el riesgo para la biodiversidad y la apicultura.
En paralelo, y en el marco del plan contra la avispa asiática (Vespa velutina), este año se han localizado y retirado 21 nidos en el suroeste de Mallorca (municipios como Palma, Calvià, Sóller y Mancor de la Vall). La campaña ha desplegado más de 1.000 trampas en primavera y permitido capturar 20 reinas.
Estas actuaciones cuentan con 28.000 euros de financiación Next Generation EU, lo que ha reforzado el trabajo de campo entre marzo y mayo. Por primera vez se ha programado también un trampeo de otoño para intentar capturar nuevas reinas antes de la siguiente primavera y así reducir la reinfestación. La Vespa velutina llegó a declararse erradicada en 2021, pero ha reaparecido puntualmente en los últimos años.
Las autoridades recuerdan que, aunque la especie no suele representar un peligro grave para personas sanas, sus picaduras pueden ser dolorosas y peligrosas para personas alérgicas, por lo que se recomienda no manipular nidos ni acercarse a ellos sin personal especializado.
Situación en España y tendencia de expansión
En el contexto nacional, la presencia del avispón oriental se verificó por primera vez en Valencia en 2013 y desde entonces ha ido extendiéndose por distintos puntos del país. En Andalucía se han consolidado poblaciones en provincias como Cádiz, Málaga, Jaén y Córdoba, con registros en localidades como Puente Genil o Montilla y barriadas cordobesas como Trassierra y Villarrubia.
El sector apícola andaluz ha denunciado pérdidas económicas vinculadas a la depredación de abejas y el saqueo de recursos de las colmenas, lo que incide en la polinización y en la productividad agrícola. La confirmación en Mallorca obliga a mantener una vigilancia constante para evitar una expansión similar en Baleares.
Qué hacer si se observa o se localiza un nido
La colaboración ciudadana es clave para la detección de nidos y ejemplares tanto de avispón oriental como de avispa asiática. Si se observa un individuo o un posible nido, se debe avisar al Servicio de Protección de Especies a través del correo especies@caib.es y, si es posible, aportar ubicación, fotos y descripción del entorno.
También se recomienda utilizar aplicaciones de reporte como Línea Verde o VespApp (desarrollada por la UIB), y consultar las infografías oficiales para una identificación correcta y evitar confundirla con avispas autóctonas. En ningún caso conviene intentar retirar el nido por cuenta propia.
La detección confirmada en Esporles, sumada al ejemplar capturado en Binibona, sitúa a Mallorca ante un reto de vigilancia y control que ya está en marcha. Con medidas de seguimiento reforzadas, apoyo técnico especializado y la implicación de la ciudadanía, el objetivo es contener la especie y reducir su impacto sobre abejas, cultivos y ecosistemas insulares.