- Un restaurante en Taiyuan, China, permite a los clientes interactuar y abrazar cachorros de león como parte de una experiencia gastronómica de lujo.
- La experiencia, que cuesta 1.078 yuanes, ha generado un intenso debate en redes sociales y duras críticas de organizaciones animalistas y usuarios.
- El local asegura que los animales están bajo cuidado especializado, pero expertos y activistas cuestionan el impacto en el bienestar animal y la seguridad de clientes y animales.
En la ciudad de Taiyuan, al norte de China, ha surgido una gran controversia a raíz de la última propuesta de un restaurante local, el Wanhui. El establecimiento, abierto recientemente, ofrece a sus clientes una experiencia singular: abrazar cachorros de león como parte de un exclusivo menú de cuatro platos. Por 1.078 yuanes (alrededor de 130 euros), los comensales no solo disfrutan de la gastronomía, sino que también pueden interactuar y fotografiarse con estos animales salvajes, lo que ha encendido el debate en internet y entre colectivos animalistas.
La difusión de imágenes y vídeos en redes sociales como Weibo y WeChat ha avivado la indignación, con opiniones encontradas sobre la ética y los riesgos de emplear fauna salvaje para el entretenimiento. Mientras algunos usuarios participan entusiasmados de la experiencia y la comparten en plataformas digitales, muchos otros consideran que se trata de un acto de explotación animal más orientado a satisfacer el deseo de exclusividad y notoriedad en redes que al bienestar de los propios animales implicados.
Una experiencia exclusiva que desata la polémica
La propuesta del restaurante Wanhui ha trascendido fronteras gracias a la viralización en internet. El menú premium, con un coste elevado para el estándar local, incluye la posibilidad de acariciar cachorros de león y hacerse selfis con ellos. Además, el local muestra llamas, tortugas y ciervos en sus perfiles de Douyin (la versión china de TikTok), sumando a la oferta animales exóticos para el contacto y la foto fácil.
Desde la apertura del restaurante, el negocio vende en torno a 20 entradas diarias para vivir esta exclusiva experiencia. Según explican los responsables del Wanhui, los animales son atendidos por personal especializado y reciben los mejores cuidados, pero las críticas en redes y por parte de organizaciones de defensa animal como PETA y Humane World for Animals siguen creciendo.
Los usuarios en redes sociales han expresado su disconformidad, tachando la actividad de «innecesaria, peligrosa y cruel», y varios han reclamado la intervención de las autoridades para investigar la situación legal y el estado de los cachorros utilizados para este servicio de lujo. Comentarios como “Esto es para que jueguen los ricos” o “Los departamentos pertinentes deberían encargarse de ello” abundan en plataformas como Weibo y Douyin.
Cuestiones éticas y riesgos involucrados en la actividad
La utilización de cachorros de león como reclamo para captar clientes ha generado un debate sobre la instrumentalización de animales salvajes en entornos comerciales. Asociaciones como PETA advierten que separar a las crías de sus madres para entretenimiento humano supone un perjuicio claro para su desarrollo natural. Jason Baker, vicepresidente sénior de PETA, ha criticado abiertamente la práctica, recordando que «estos animales son seres vivos y sensibles, no simples accesorios para redes sociales».
El debate se ha centrado no solo en la cuestión ética, sino también en los posibles riesgos de seguridad para los clientes y los propios animales. Expertos en bienestar animal subrayan que incluso siendo jóvenes, los leones pueden representar un peligro potencial si se sienten estresados o son manipulados en exceso. Además, se apunta al riesgo de transmisión de enfermedades entre humanos y fauna salvaje, así como al impacto que tiene en la vida futura de los cachorros, que difícilmente podrían adaptarse de nuevo a un entorno natural tras haber sido improntados con atención humana intensiva.
Peter Li, experto de Humane World for Animals, considera que “explotar animales salvajes para atraer clientela es moralmente inaceptable y peligrosamente irresponsable”, y sostiene que la práctica debe ser revisada por las autoridades pertinentes.
Precedentes, críticas sociales y debate sobre el bienestar animal en Asia
El fenómeno no es del todo nuevo en Asia, donde han proliferado negocios que ofrecen contacto directo con animales, desde los populares “cafés de gatos” en Japón hasta otros conceptos similares que han llegado a Europa bajo modelos relacionados con la adopción y el refugio animal. Sin embargo, la diferencia clave radica en el tipo de animales involucrados y el objetivo comercial directo, como ocurre con los cachorros de león en el restaurante Wanhui.
Las críticas de veterinarios y especialistas en comportamiento animal enfatizan que este tipo de actividades suelen responder más a la demanda humana de experiencias novedosas que a las necesidades reales de los animales. El veterinario Víctor Algra, por ejemplo, destaca que muchas veces no se consideran los riesgos de estrés y enfermedades para la fauna salvaje implicada en estos contextos.
Además de los leones, el restaurante ofrece interacción con otros animales exóticos, y, según señalan usuarios y activistas, este enfoque plantea preguntas incómodas sobre la gestión ética de la vida animal y el límite entre la innovación gastronómica y el bienestar de los seres vivos.
En otras partes de China, incluso han resurgido casos similares de explotación animal en hoteles que utilizan animales como método de entretenimiento, lo que demuestra que la polémica podría extenderse todavía más.
Mientras la discusión sigue abierta y las autoridades valoran intervenir, la historia de este restaurante ilustra cómo la búsqueda de experiencias exclusivas puede chocar frontalmente con la conciencia colectiva sobre el respeto a los animales. La creciente preocupación en la sociedad china (y mundial) por el uso de animales salvajes en actividades comerciales de ocio y lujo se ha evidenciado en este caso.
