Dentro del reino de los anfibios, la rana bermeja es una de las que más sorprende por su capacidad para tolerar bajas temperaturas. Ubicada sobre todo en zona de montaña, es de los animales que más ha sabido adaptarse a un hábitat cambiante.
Conoce cómo es la rana bermeja, dónde vive, qué come y cómo es su reproducción.
Características de la rana bermeja
La rana bermeja, conocida también por su nombre científico, rana temporaria, es un anfibio caracterizado por tener una cabeza ancha con el morro en forma redonda. Sus ojos destacan sobre la cabeza y tienen una pupila horizontal. Además, se le detectan fácilmente los tímpanos, algo que en otras ranas no es tan sencillo. Desde el ojo y hasta el inicio de las patas delanteras, tiene una especie de máscara de un color diferente al de su cuerpo en ambos lados. Esta suele ser entre marrón y roja.
El cuerpo de la rana bermeja mide entre 6 y 10 centímetros, con un peso aproximado de 27 gramos. Puede ser de distintos colores aunque los habituales son verde oliva, gris, castaño, amarillo, etc. Son capaces de oscurecer su color para esconderse o mimetizarse con el entorno. También es habitual que tenga ciertas coloraciones, como negro, rojo o azul cuando llega la época de la reproducción.
En algunos casos se han encontrado ranas bermejas albinas, que son de color amarillo y tienen los ojos rojos.
La piel de este anfibio es lisa pero tiene algunas rugosidades por los lados de su cuerpo. El vientre es blanco amarillento.
A pesar de ser una rana, las patas traseras son algo más cortas que la media de longitud de estos anfibios, aún así, eso no le impide dar grandes saltos. Conserva la membrana interdigital en las dos terceras partes de los dedos que le sirve para ser una buena nadadora.
La rana bermeja vive unos 3-4 años, sin embargo, hay casos en los que su esperanza de vida es bastante mayor, hasta los 10-13 años. En cautividad, se acerca fácilmente a esa cifra.
Al igual que otras ranas, los hábitos son tanto diurnos como nocturnos si bien, si la temperatura es elevada, suele esconderse hasta que anochece y el ambiente es menos caluroso para ella.
La rana bermeja suele hibernar de octubre a febrero, aunque, dependiendo de su hábitat, puede acortarse o alargarse más. Para ello, utilizan charcos con al menos medio metro de profundidad o también troncos o piedras.
Diferencia entre rana bermeja macho y hembra
La diferencia que existe entre una rana temporaria macho y una rana bermeja hembra estriba básicamente en el tamaño. Los machos son más pequeños que las hembras, aunque las patas delanteras las tienen más fornidas que sus compañeras.
En la época de celo, se distinguen también porque los machos tienen la garganta de una tonalidad azul, roja o negra mientras que las hembras desarrollan unas almohadillas para favorecer el amplexo a la hora de la reproducción. En los machos, aparecen unas callosidades en las patas para poder sujetarse y no resbalarse de la hembra cuando la monta.
Hábitat de la rana temporaria
La rana bermeja se encuentra distribuida por distintos países. En el continente europeo, se localiza en la mitad norte hasta los Urales, así como las Islas Británicas. También está ubicada en el sur, incluso en los Alpes, los Pirineos, la Cordillera Cantábrica, etc.
Por otro lado, Sudamérica, Australia… son también lugares donde se puede encontrar esta especie de anfibio.
Su hábitat predilecto es uno húmedo y fresco, prefiriendo las montañas (hasta 2600 metros) antes que las zonas más bajas. Gusta estar donde haya arroyos, charcos, o un ambiente húmedo. Tolera bien la temperatura baja.
Qué come la rana bermeja
Como cualquier rana, esta también es carnívora y, por ende, se alimenta de insectos como lombrices, babosas, arañas, cochinillas, etc. A menudo, también puede comer caracoles jóvenes ya que tienen una concha blanda.
La rana bermeja hace uso de su lengua para acercarse lo suficiente a la presa y lanzarla para atraparlas. Al contrario que otros animales que deben cazar, la rana se queda fija en un lugar esperando por las presas que puedan caer y que estén a la distancia de su lengua.
En cautividad, siendo renacuajos pueden alimentarse de lechuga o espinacas hervidas y troceadas, o bien hojuelas de pescado dos veces al día. Es conveniente añadirles productos vitamínicos y calcio para completar su dieta. De adultos, comerán como una rana en estado salvaje.
La reproducción de la rama bermeja
La rana bermeja se reproduce a principios de primavera. En ese momento, los machos desarrollan unas callosidades visibles en sus dedos, al mismo tiempo que las hembras tienen unas almohadillas a ambos lados de su cuerpo que ayudan al amplexo.
La reproducción tiene lugar en una charca o en zonas donde se acumule el agua y no les importa que esté demasiado fría, ya que el macho entra en el agua para llamar a las hembras y cortejarlas.
El amplexo tiene lugar de forma axilar y, la fuerza con la que el macho se aferra a la hembra hace que, en un primer momento, expulse todos los huevos en el agua. Estos estarán en dos bolas que contienen entre 700 y 4500 huevos. Al contacto con el agua las bolas se hincharán bastante y será el macho el que fecunde los huevos.
Estos permanecerán entre 2 semanas y un mes en el agua, dependerá de la temperatura de la misma.
Algo característico de la reproducción de la rana bermeja es que sus huevos suelen tener la cara oscura orientada al sol para así absorber la radiación y el calor que irradia el astro.
Una vez nacen los renacuajos, estos miden entre 6 y 9 mm y crecerán hasta los 46mm. Son de color negro, pero va aclarándose conforme pasan los días. Sí tienen un espiráculo en el lado izquierdo y es habitual que tengan manchas doradas en el vientre y en la cola.
Cuando se produce la metamorfosis, los renacuajos salen a la tierra como ranas jóvenes y se suelen quedar en la zonas cercanas a donde han nacido hasta que finalizan el proceso de transformación.
La rana bermeja como mascota
No es habitual tener una rana de esta especie como mascota si bien sí hay personas que la han encontrado en la naturaleza y se la han quedado como mascota, a pesar de ser un anfibio catalogado con «protección de interés especial», ya que está prohibido cazarlas.
Sin embargo, sí puede darse el caso de que haya quien tenga una rana bermeja como mascota, y los cuidados que necesita, además de los relacionados con la alimentación, reproducción, etc. se centran en el terrario.
Este ha de simular el hábitat natural de la rana, es decir, un habitáculo lo suficientemente grande como para poder dividirlo en una zona acuática y otra provista de vegetación (troncos, hojas, piedras, etc.) con una temperatura que no sobrepase los 24 grados.
Es importante que el terrario tenga tapa para evitar que la rana pueda escaparse.