- El 16 de junio se celebra el Día Mundial de las Tortugas Marinas para concienciar sobre su protección.
- Las tortugas marinas existen desde hace más de 200 millones de años y enfrentan serias amenazas causadas por la acción humana.
- Actualmente hay siete especies y seis están en peligro de extinción, principalmente por contaminación y pesca incidental.
- Cualquier persona puede colaborar en su conservación con acciones responsables y apoyo a programas de protección.

El 16 de junio se conmemora una fecha clave para dar visibilidad a uno de los grandes retos de conservación marina: la protección de las tortugas marinas. Estas criaturas, con un pasado que se remonta a hace más de 200 millones de años, han sobrevivido desde la época de los dinosaurios, pero hoy se ven amenazadas principalmente por el impacto humano sobre los océanos y las costas.
La jornada busca movilizar conciencias y promover acciones para garantizar que estos reptiles milenarios sigan surcando los mares. El Día Mundial de las Tortugas Marinas se asocia con la figura del conservacionista Archie Carr, nacido el 16 de junio de 1909, cuya entrega resultó fundamental para la protección de estas especies, especialmente en América Central.
Una historia de supervivencia y un papel esencial en el océano

Las tortugas marinas no son solo testigos del paso del tiempo, sino también auténticas reguladoras de la salud del océano. Sus funciones van desde mantener el equilibrio de las poblaciones de medusas y esponjas, hasta facilitar la circulación de nutrientes entre hábitats como los lechos de pastos marinos y las playas de anidación.
Actualmente se reconocen siete especies de tortugas marinas: la tortuga plana (Natator depressus), verde (Chelonia mydas), carey (Eretmochelys imbricata), boba (Caretta caretta), laúd (Dermochelys coriacea), olivácea (Lepidochelys olivacea) y bastarda (Lepidochelys kempii). Seis de estas especies están en la Lista Roja de la UICN debido a su estado de amenaza.
Su dieta varía según la especie, algunas se alimentan principalmente de pastos marinos, otras de medusas o de pequeñas criaturas del fondo oceánico. Un dato curioso: no poseen dientes, sino picos de queratina que les permiten desgarrar y masticar.
Amenazas actuales: el enorme peso de la acción humana

La vida de las tortugas marinas nunca ha sido sencilla, y hoy se complica aún más a causa de la huella humana. Entre los principales desafíos para su supervivencia destacan:
- Contaminación marina, especialmente por plásticos, que suelen confundir con alimento.
- Pesca accidental, ya que quedan atrapadas en redes y artes de pesca.
- Cambio climático, que altera la temperatura de las playas y afecta la incubación de los huevos y el equilibrio de sexos en las crías.
- Turismo masivo y desarrollo costero, que destruyen o alteran los hábitats donde anidan.
- Caza furtiva y comercio ilegal de carne, huevos y caparazones.
Estas amenazas, sumadas al efecto de depredadores y la intervención humana, hacen que solo aproximadamente una de cada mil crías alcance la adultez.
Curiosidades y datos destacados sobre las tortugas marinas
Las tortugas marinas son sorprendentes por su biología y comportamiento:
- Su caparazón forma parte de su esqueleto y está compuesto por más de 50 huesos.
- Pueden recorrer miles de kilómetros en migraciones entre zonas de alimentación y playas de anidación.
- A la hora de reproducirse, las hembras vuelven a la misma playa donde nacieron, depositando más de 100 huevos en cada puesta.
- Al nacer, las crías se guían hacia el mar por la luz de la luna o de las estrellas reflejada en el agua.
- Algunas especies pueden vivir más de 150 años, y la tortuga laúd puede llegar a medir hasta dos metros y pesar más de 500 kilos.
Iniciativas internacionales y el papel de la educación en la protección
Conservar las tortugas marinas requiere el esfuerzo conjunto de gobiernos, organizaciones y ciudadanía. Existen acuerdos como la Convención Internacional para la Protección de las Tortugas Marinas, que coordina acciones en las Américas y el Caribe, así como recomendaciones de la NOAA y el PNUMA para prohibir la captura deliberada, promover dispositivos excluidores en pesquerías y fomentar la investigación científica.
¿Qué puedes hacer tú para ayudar?
Cualquier persona, vivas donde vivas, puede poner su granito de arena para la supervivencia de las tortugas marinas:
- No dejar basura en la playa ni arrojar residuos al mar.
- No tocar ni consumir huevos de tortuga.
- Evitar acercarse o molestar a los ejemplares en las playas.
- Participar en campañas de limpieza y conservación o apoyar a organizaciones especializadas.
- Reportar avistamientos de nidos o tortugas a las autoridades pertinentes.
Proteger a las tortugas marinas contribuye a preservar la biodiversidad y el equilibrio de los ecosistemas oceánicos. Cada pequeña acción ayuda a que estos animales, que han existido por millones de años, sigan formando parte de nuestro planeta, recordándonos la importancia de cuidar nuestro entorno para garantizar su supervivencia y la nuestra.